sábado, 28 de febrero de 2009

Ya mi miedo traspasó la frontera de toda esa gente extraña,
quedo/a solo en las memorias y de a poco se va..
son esas derrotas dulces que se extrañan más que a un duelo triunfante
de las cuales soy testigo, lo cual implica mi sangre derramada.
mis heridas no quieren que yo cicatrice
y como ella se hace fluido entre mis manos y mis ojos
las adormece, acaricia y apacigua hasta la temperatura justa
para hacerse de su timón, directo al infierno.
Me destaca con desprecio y no tengo precio.
Las llamas no permanecen encendidas toda la eternidad (eso espero)
porque nada es eterno, por eso existe la tristeza.
Por eso existo yo, este es mi legado de bruma húmeda y puertas oscuras
sin final feliz.. sin final.
Inhalo los olores de este verano y estoy bien,
ni la niebla de la noche me baja de un ondazo al suelo,
hasta que su inciensio se hace presente
me destila de mi ramal feliz.nofeliz y anula todo.
Sirvo para gustar solo de su olor, pero solo cuando quiere
cuando se hace encender por las lágrimas y la tristeza que me deja alerta,
como quien comiese la carne de loto no pertenecería más a su partria.

martes, 10 de febrero de 2009

Despavilado

Hoy entre bostezo y luchando contra el sueño, salí a laburar.
El centro lleno de personas que caminan y corren por cumplir su cometido sin fijarse a quién o qué atropeyan en el camino, el ser humano tiene como don el egoísmo, el ser humano tiene lamentablemente como don el ser envidioso, porque lo lleva adentro, y no la admiración.
Tanto le cuesta a la gente admirar un objeto?, es tan placentero contemplar cualquier cosa con la mirada sin gastarse, esas cosas de las que uno se enamora y le saca una sonrisa.., solo para después de un rato empezar a analizarlo. (error y me hago cargo).
Tanto le cuesta a la gente admirar a otra gente?, siempre desde el fondo nace ese sentimiento de envidia ante el logro ajeno en el sueño de uno, y hasta en un no sueño personal también!.. siempre esas ganas de tener tantas cosas y no justamente para sacearlas, si no para después poder tener más.
Entre toda esa vomitada en pleno reconquista y lavalle me dí cuenta que no se caminar sin mirar para abajo, ya es parte de otra obsesión contar las baldosas que piso, ni te cuento las baldositas chiquitas amarillas, que difícil es a paso céntrico donde todos te comen los tobillos si no hacés todo rápido!. Es tan mágico tener un divertimento propio y saber que cientas y cientas de personas me cruzan por día ni enterados de porqué mi sonrisa o de porqué mi paso alterno. Algunas/os se ríen, algunas/os me chocan, algunas/os se corren, algunas/os corren y otros no están, "no se porqué".
Solo sé que levanto la mirada un instante para tener en claro el plano, pero solo ese segundo, para no perderme de la cuenta que tenía en mente (sin querer), baldosa 16 del cuarto edificio?, perdí.