sábado, 17 de abril de 2010

8:35 pm

Si tu sonrisa me delata éstas ganas de querer (siempre) un poco más, no me quejo si fue el tiempo un señuelo para vos. Somos almas tan cansadas de haber provocado éste pasado, que el veneno ya no es arma para bajarnos.
Late eso que hicimos y todo revive en las miradas, dejando mi vista corta tratando de ver toda la mágia de tu esencia, mientras, me esfumo con elegancia y transformo a la constancia en un camino disparejo sembrando nuestra distancia, para que florezca y fallezca, pensando que no será jamás como eso que construimos.