domingo, 18 de marzo de 2012

Adrenalina


Me acosté, doblado, a las 8 de la mañana y a las 10:30 me desperté
vestido con los brazos abiertos, como en vigilia, pensando
en cuando abrazaba al capitán después de su gol, todavía no me pude volver a dormir.


1 comentario:

Blackbird dijo...

Jaja, me mata, todo así re escondido... Linda mañana, esa!